Akuma Gesher es la líder de Under Legacy. Es una mujer de estatura media, media melena castaña y ojos marrones. Es una persona arrogante y engreída. Las únicas verdades que tienen valor para ella son las que son útiles, por lo que ve la ciencia como ciencia aplicada, y todo conocimiento como poder. Tales cosas, como la integridad física o del alma carecen de importancia, pues sólo le interesa lo útil. Su falta de escrúpulos y su ambición, facilita el camino incluso traspasando los límites de lo moralmente aceptable.
Gesher ni es vaga ni pesimista. Sabe cómo lidiar con los contratiempos y los fracasos. Su enorme ego, considerándose superior a los demás, le ayuda a salvar los problemas, pese a que nunca se hace cargo de las consecuencias de sus actos. Cómo está convencida de que sus acciones son correctas y justas, jamás se arrepiente de haberlas hecho, pues carece de remordimientos.
Evita la responsabilidad propia, y la carga en otros. Si es necesario niega la verdad aunque sea obvia, manipulando la realidad para su propia conveniencia. Al final incluso logra confundir al otro, ya que sabe darle la vuelta a cualquier hecho, usando medias verdades y sabiendo utilizar las palabras adecuadas.
Gesher es una persona manipuladora y controladora, capaz de abusar y maltratar a quien le conviene, cuando necesita de ese alguien para conseguir sus deseos. Por ese motivo, puede convertirse en una mujer aduladora, y mantener tantos discursos diferentes como personas con quien se relaciona. Es una mentirosa compulsiva incluso cuando no es necesario, así que continuamente inventa historias falsas para crear conflictos, tergiversando la realidad como si se tratase de una bruja que sabe destilar y filtrar toda clase de venenos. Es consciente de que no hay garantías y de quién puede fiarse: de sí misma. Ejemplifica el espíritu de la sociedad comercial en la que su interés propio y el público pueden llegar a solaparse. Aun así, Akuma representa la peor versión de ésta, siendo una mafiosa especuladora.
Aunque siente un orgullo desmedido por su inteligencia, le angustia sobremanera la rotundidad de la muerte. En la inmensidad del universo, ella es microscópica, y se da cuenta del poco poder que tiene, de lo insignificante de su genio, de la banalidad de sus logros, y la trivialidad de su fama y su fortuna. Por lo tanto, su deber es no dejar nunca de intentar cambiar y dominar el mundo que le rodea. Es una fanática de la disciplina y la perfección.
En sus relaciones personales es adusta y áspera, desapacible en el trato. Si alguna vez hace algún comentario ocurrente, es para recordarle a la gente su superioridad intelectual, no para hacerle reír. A parte de egocéntrica, es también una persona cínica, que desdeña del lenguaje del honor, y se burla de quien espere un comportamiento noble por parte de los ciudadanos y sus representantes. Desvalora la actitud honorable en los asuntos públicos ya que de hacerlo, nunca podría mantener un comportamiento déspota y esclavista, y admitir, que el poder se justifica a sí mismo y es la única realidad. Una situación que anula el significado de la justicia y convierte el bien común en una farsa.
Akuma Gesher planificará la manera de extraer todos los recursos del planeta y gestionarlos para la futura producción y ventas. Operaciones de miles de millones de iridios, en una sociedad donde el apoyo económico se traduce a una mayor sofisticación tecnológica. Su miedo por la muerte es la base de su despotismo, y la única cosa que escapa de su control definitivo.
Así con la ayuda de nuevas tecnologías, de su imaginación excepcional y de su gran determinación, intentará adquirir el conocimiento que le falta para construir la máquina que le dará la única cosa que le falta: la inmortalidad.